Como si no hubiera bastante con las reformas introducidas en el "Mercado Laboral" en la etapa final del gobierno del Psoe, ahora viene a imponernos muchas más medidas, a cuál más leonina, de Reforma Laboral.
Dicen los críticos que la reforma es la que se ha ido haciendo desde el 82, que poco a poco se han ido cediendo en derechos laborales adquiridos no sin sangre y sudor y con buenos vientos económicos.
¿Acaso no han sido grandes reformas el contrato fijo discontinuo? ¿O las abusivas concepciones del contrato a fin de obra o servicio? ¿O las altas a trabajadores en las empresas de construcción desde el lunes hasta el viernes sin mayores derechos o reconocimientos? ¿O la investigación y formación sin que hasta hace poco constara en el currículo y en periodos de cotización?
El eufemismo de Reforma Laboral de la que se habla hoy día, cuando ya poco queda por reformar, se refiere más concretamente a la generalización del despido libre como método, a la casi gratuidad de las indemnizaciones en los derechos adquiridos por año trabajado, a la extensificación de contratos parciales y de basura como norma y la bajada generalizada del importe de los mismos. Se dice, no sin razón, que con el despido de los padres antes trabajadores por tiempo indefinido, se paga la mitad a los hijos por tiempo parcial.
Las prácticas abusivas de recortes que se han ido produciendo estos meses atrás en las Comunidades gobernadas por el PP hay que considerarlas como ensayo a las medidas del gobierno de Rajoy de diciembre de 2011, enero de 2012 y febrero, además de las que surjan de los Presupuestos de fines de marzo.
Por eso las movilizaciones sociales y laborales deben ser la respuesta firme a esta agresión desmedida. Cataluña va por delante porque su gobierno de derechas hace tiempo que las impone. La situación, ya generalizada, debe unir estos objetivos y que los sindicatos mayoritarios se dejen de remilgos y respetos a unos empresarios y a una administración que en nada les considera.
Las manifestaciones convocadas por la Federación Europea de Sindicatos deben ser una antesala a las mayores respuestas que tienen que darse a un neoliberalismo desbocado que tiene como objetivo el desmantelamiento social, la mercantilización total de la economía y los servicios y esclavización laboral.
Las manifestaciones convocadas necesitan la asistencia de todas las personas, pues más tarde o más temprano desgraciadamente todos estaremos afectados, personalmente o con nuestros familiares y amigos.
En la manifestación de esta tarde en Sevilla culminó el acto el profesor en Economía Juan Torres, arengando sobre la necesidad de Reformas en los tributos para la Iglesia, los recortes inexistentes en gastos militares, las peticiones de reformas laborales de Botín y su nº 2 que ganan 15 Millones de € al año, la parada en seco de la ley de Dependencia, etc.
Ante las próximas convocatorias del próximo 11 de marzo:
MOVILÍZATE POR TUS DERECHOS
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